miércoles, 21 de octubre de 2009

El final de El Porquerizo

Después de abandonarla bajo la lluvia, el príncipe que se disfrazó de porquerizo y el emperador buscaron durante cuarenta días y cuarenta noches a la princesa. Pero ya no la encontraron.
Al príncipe nunca le abandonó el remordimiento. El recuerdo de la mimada princesa, llorosa y empapada, y la nostalgia de sus noventa y seis besos -leves, rápidos y con una irritación contenida, pero, ay, tan dulces- quedaron ya para siempre clavados en su corazón.

lunes, 19 de octubre de 2009

Cuarto ejercicio.

El cuarto ejercicio es este.

jueves, 1 de octubre de 2009

Tercer ejercicio: un mundo casi olvidado

El mundo no ha sido siempre como hoy. Sé que esta afirmación os sorprenderá pero así es.
Este tercer ejercicio os demostrará que no miento. Tenéis que pedirle a un testigo del mundo de hace cincuenta o sesenta años (un abuelo o una abuela servirían estupendamente) que os cuente una historia, una anécdota, un sucedido... de su infancia o de su juventud y luego la escribís lo mejor que sepáis.

Segundo ejercicio:la creación del cuaderno

El segundo paso es la creación del cuaderno. Podéis seguir las instrucciones del ejercicio dos del año pasado. El comentario dejadlo en esta entrada.

Primer ejercicio: el bautizo

"... partiré de viaje enseguida, a vivir otras vidas, a probarme otros nombres..."
Joaquín Sabina

Este año, como el pasado, lo primero que haremos será elegir un nombre para el escritor que vamos a ser durante el curso.
Los nombres (como todas las palabras) tienen un poder mágico. Cambiarnos el nombre es cambiar quiénes somos. (Vuestro profesor, por ejemplo, en este espacio de la red es un mago sabio y poderoso.) Elegidlo con cuidado. Será una máscara que os puede servir tanto para ocultaros como para convertiros en uno de esos personajes que secretamente queríais ser.
Espero que acertéis en la elección.